El primer fallecido en motocicleta.
Publicado: 17 Feb 2015, 10:55
El 1 de Junio se cumplirán 119 años de la primera muerte de la historia en motocicleta, la de Sylvester H. Roper, que inventó una motocicleta de vapor en 1.867 en Boston. De hecho, hay quien dice que fue el inventor de la motocicleta. La diferencia de Roper con otros inventores contemporáneos fue que su principal interés era averiguar “cuánto de rápido podía ir” citando sus propias palabras. Roper fue una persona de extraordinaria inventiva, lo que le llevó a patentar diversos carros de vapor e incluso escaleras de escape para incendios.
El 1 de Junio de 1.896, cuando tenía 73 años, hizo una demostración de su máquina en el Charles River Speedway, un velódromo de asfalto ubicado en Cambridge, Massachusett. La moto de vapor de Roper podía alcanzar 65 Kms/h lo que le hacía ser posiblemente “la cosa más rápida sobre ruedas” como se dijo en la prensa de la época. En el velódromo compitió contra dos ciclistas profesionales, a los que humilló con facilidad. Los comisarios del velódromo instaron a Roper a averiguar hasta dónde podía llegar el artefacto, lo que él hizo sin dudar. Pero dos vueltas después, se le vio tambalearse y llegar de milagro a la salida, donde se desplomó muerto en brazos de su hijo Charles.
El primer motociclista fallecido no murió de accidente, sino de un ataque al corazón producido por la emoción de la máquina y la velocidad. Sirva esto de pequeño homenaje a un personaje prácticamente olvidado pero a quien todos debemos mucho.
Pues eso.
El 1 de Junio de 1.896, cuando tenía 73 años, hizo una demostración de su máquina en el Charles River Speedway, un velódromo de asfalto ubicado en Cambridge, Massachusett. La moto de vapor de Roper podía alcanzar 65 Kms/h lo que le hacía ser posiblemente “la cosa más rápida sobre ruedas” como se dijo en la prensa de la época. En el velódromo compitió contra dos ciclistas profesionales, a los que humilló con facilidad. Los comisarios del velódromo instaron a Roper a averiguar hasta dónde podía llegar el artefacto, lo que él hizo sin dudar. Pero dos vueltas después, se le vio tambalearse y llegar de milagro a la salida, donde se desplomó muerto en brazos de su hijo Charles.
El primer motociclista fallecido no murió de accidente, sino de un ataque al corazón producido por la emoción de la máquina y la velocidad. Sirva esto de pequeño homenaje a un personaje prácticamente olvidado pero a quien todos debemos mucho.
Pues eso.