Para poder pintarlo después de restaurado.
No he tocado nunca la fibra de vidrio pero ahora con la restauración de mi Burrita hay que hacer de todo, una lectura de un articulo por acá, un vídeo por allá, alguna información recopilada y manos a la obra.
Comienzo lijando a mano las ocho, sí habéis leído bien ocho capas de pintura. Utilizad siempre mascarilla, guantes y gafas, sobre todo si lijáis fibra que el polvo es muy dañino.
1ª Gel coat negro.
2ª Gris fondo.
3ª Rojo color original.
4ª Rojo.
5ª Gris.
6ª Blanco.
7ª Amarillo.
8ª Gris perla con piel de naranja.
Tenía un desconchón en la culera de más de 3 mm de profundidad.
- Se aprecia el gel coat original de fondo
El popurrí de colores.
Resulta que una de las aletas delanteras que se fijan al chasis, está parcialmente rota y se conoce que la han intentado reparar en más de una ocasión y si lo han hecho igual que la pintura, pues normal que sea una chusca y no les dado resultado.
Me dispongo a limpiar bien la zona con un taladro rectificador al que le acoplo una lija.
Limpio bien la zona de pinturas donde posteriormente pegare la nueva fibra de vidrio con resina de poliester.
Aquí se aprecia la fisura que está a punto de desprenderse por completo.
Al no ser capaz de sujetarla con alguna pinza para poder darle la fibra se me ocurrió coser con nailon, la practico unos agujeros con una broca de 1 mm y con hilo de pescar le dí unas puntadas y perfecto.
Doy la primera capa, siempre más pequeña que la zona limpiada para que las capas sucesivas puedan montar, en el interior y exterior de la rotura y a esperar a que seque para seguir con la reparación.
Continuara.
